jueves, 28 de enero de 2016

Encuentro 11 de enero de 2016



Por fin la lluvia, una lluvia suave, un chirimiri constante. También los días de lluvia dejan un entorno cercano sugerente y relajante, el olor de la lluvia -el ozono- y la tierra mojada disminuye las pulsaciones y serena el espíritu. Tiene su encanto porque las calles son más vacías, y en sus suelos se forman pequeños charcos que como espejos reflejan un cielo de gran variedad de grises (como con las películas en blanco y negro de 400 ASA), también las fachadas sin contrastes son más monótonas, y al atardecer las luces de alumbrado son igualmente tenues. ¡Ahhh! Pero también tiene sus inconvenientes porque se mojan los zapatos y los pantalones dejando los pies fríos, igualmente la ropa que te cubre, pese a los paraguas, están tan mojadas que al colgarlas en las perchas mojan el interior de las prendas que se ponen encima, también se ensucian los suelos al entrar en las casas y los zapatos no te los puedes poner al día siguiente aún húmedos. ¿Es incomodo, No?.

Llegué relativamente temprano por lo de los moscosos y ya me encontré a Alfonso “el  incansable” en la tarea y al frente del equipo. Me incorporé al Grupo de Trabajo desde el principio e invité a Miguel a la tarea, ¡Déjalos Antonio, son expertos y nosotros unos principiantes que al final meteremos la pata!. Alfonso preparaba las espinacas y explicaba: Este plato me lo ponía mi madre, ¡veréis la pinta en la que queda!. Nos advirtió. Sin duda la imagen que debería patrocinar este encuentro sería la de este plato, pero la lluvia por extraña y esperada también lo merecía para romper como imagen inesperada entre las de las comidas. Sé que Alfonso me disculpará.

Al poco llegó Alberto “el ejecutivo” con su móvil a pleno rendimiento, y nuestras conversaciones de cuchillos, cucharas, sartenes y del trae pacá, dame eso, corta esto y pon allí, pasamos al “pasmo” digo al “pacto” CUP-Junts pel sí de hace justo dos días.

A boca jarro, le digo a Alberto: Ha sido humillante. Artur Mas en su discurso “de despedida”  los ha puesto de “ropa pascua” que resultó ser realmente el objetivo prioritario de su discurso, pero aparte de cómo lo expuso “el gran vengador”, la realidad es que la CUP tendrá que pedir perdón “por poner en crisis la oportunidad de independencia catalana”… El rencor de Mas ha superado los límites. ¿Se puede tener como gobernante un personaje así?. Veremos cómo se encaja todo esto a la hora de materializar leyes con un gobierno con dos caras tan opuestas, que le podríamos llamar el gobierno del Dr. Jekyll.

-     Ya hablaremos ahora, me dijo balanceando el dedo índice.

Alberto se quitó la chamarra y le pedimos dos cervezas a J. Antonio, que las tira con auténtica maestría.

Pedro cortaba los cogollos a veces en cuatro y otras en seis ¡Deben de ser más o menos iguales! decía. Y es que Pedro hombre de orden le gustan las cosas bien hechas, la armonía y nada de improvisar. De reojo miró a Alberto diciéndole ¡Me tenéis contento!.

Gabriel probaba el tomate que preparaba Alfonso en paralelo a las espinacas, y siguió cortando lonchas de una pieza de panceta que después las troceó aún más para poder rociar las espinacas con los pequeños trozos. Todo marchaba como en los programas de gastronomía, tan de moda ahora en la TV, que conjugan perfectamente el “pan y circo” de los romanos.

Cogollos con anchoas: 
Así de fácil, así de simple y así de grato el color de este plato de amarillos a verdes desde el blanco del cogollo. Colores brillantes por el aceite de las anchoas, y estas con su caliente color siena contrastaba con los fríos verdes y amarillos, así de proporcionado el plato si los cortes son magistrales. En cuanto a sabor lo dejamos a la imaginación de cada uno.

Al poco llegaron Emiliano y Enrique que terminaban con los posibles asistentes dado que Luis se había enfriado con la lluvia y se quedó en casa, cosa que, egoístamente hablando, le impidió traernos un postre prometido, pero nos dejó dicho que nos compensaría en el siguiente encuentro. De manera que le entraron a los cogollos sin dudarlo.

Panceta - Restos: 
Como los cogollos son ligeros y aún quedaba algo de tiempo para que se hiciese la espinaca en el horno, alguien miró lo que había quedado de panceta y no lo pensó dos veces. Se cortaron lonchas muy finas, se echó muy poco aceite en la sartén y al poco las lonchas se doraban y recogían en si mismas al  desprenderse de su grasa… dos vueltas y de la sartén al plato. Poco duraron en él, pese a la OMS. Algunos-todos mojamos pan en la sartén y tan rápido fue aquello que al reportero Gabriel sólo le dio tiempo de tomar la imagen  expuesta.


Pastel de Espinacas: 
Pues sí, este plato obtuvo el éxito que ya su imagen pronostica y más o menos el proceso seguido fue el siguiente: Alfonso puso las espinacas a hervir, el agua resultante al apartar las espinacas la vertimos en una fuente que, con mi habitual torpeza en la cocina (que razón tiene Miguel), volqué un poco al coger no se qué instrumento. Pese a ello me tocó empapar de tal líquido verdoso, algo más transparente y menos brillante que aquel Peppermínt  Frappé de Geraldint Chaplin, piezas de pan de molde con los que cubría seguidamente las espinacas depositadas por Alfonso en una gran bandeja ovalada de barro. Pero el recubrimiento, que debía ser total para que un posterior vertido de huevo no se mezclara con las espinacas, no era fácil, los huecos entre las piezas cuadradas que no debían superponerse y cubrir totalmente el óvalo requería cortes de pan con la figura geométrica exacta unas veces triangulares, otras trapezoidales, etc. y esa cosas las controlo mejor, de tal manera que quedó una cubierta sin fisuras.
  
Con la llegada de los últimos primerlunenses Alfonso que batió doce huevos  cubrió el pan de toda la bandeja y la metió en el horno. Mientras se hacía comentamos algo desinteresados el pacto catalán, la rabiosa despedida de Mas y el nombramiento de Puigdelmont como tres momentos diferenciados, que dieron tema para un ratito.

1.- Sobre el pacto Alberto dijo, no hay que olvidar que la CUP es independentista. Sí, es de izquierdas pero independentistas y por eso han optado por el apoyo. En efecto entre ideología y territorialidad han elegido territorio, le dije, pero para mí esta elección denota la victoria del liberalismo catalán. En cuanto a la CUP, dividida en dos y humillada, pese a enviar a la segunda fila a Mas (nadie espere su retirada ni dejar de facto la dirección de su partido), tienen que resolver lo que se evidencia como una gran contradicción. Dudo que la solución sea unánime y habrá que esperar que haya una radicalización de los “zurdos” y un aumento de tragaderas de los independentistas que pasen a las filas de Junts pel sí, y eso si no vuelven a descomponerse en el buen número de organizaciones de las que se compone la Candidatura de Unidad Popular (CUP).

De todas maneras sobre el pacto podemos ver lo que la CUP ha dejado atrás en el interesante artículo “La triste inmolación de la CUP” , que no debéis dejar de leer.

2.- En cuanto a “la despedida de la ira” de Artur Mas. Ya hemos resumido algo, pero es esclarecedor este otro artículo, al respecto, titulado: ¿Y ahora qué? 

3.- Finalmente sobre El nombramiento de Puigdelmont (lo más alto del monte, o el pico del monte) para que hacer elucubraciones?, si nos narra un inmejorable artículo cuyo título pudiera querer hacer un juego de palabras con el significado del nombre del nuevo President, el título es: “La cabra tira al monte” ¡Curiosísimo el resumen histórico inicial!. 

De la espinaca todos repitieron, menos Miguel, que muy comedido con la pitanza, nos dice, que no hay que pasarse dos veces ¡Cuestión de salud!.

Pescada al horno con tomate y aceitunas:
Alfonso nos introduce al plato diciendo que no era una pescadilla, ni pijotas, sino una buena y fresca pescada que cubría la bandeja, abierta y preparada para pasar por el horno. El tomate que la cubría lo había preparado Alfonso y Pedro troceó aceitunas en pequeños trozos (más pequeños, en esta ocasión, que cuando pica los ajos)

Puesta en la mesa, el primero que la probó dijo que aún no estaba lo suficientemente hecha y un segundo lo ratificó y volvió al horno. A la vuelta había diferencias entre: así ya está en su punto y alguno pidió más tiempo, pero se quedó como vino y se terminó. Parece ser que el punto en el pescado es más difuso que el de la carne.

Enrique con la misma intensidad que en el primer plato se resiste a distribuir la pescada y recuerda que hay que planificar el Bilbao-Granada, porque en coche o en avión el viaje requiere más de un día. Alberto dice estar dispuesto a preparar cosas, pero hay que concretar.

Interrumpo a Emiliano y a Pedro para decirle a este último que nos habíamos olvidado de freír con mantequilla las rodajas de piña, que quizás nos daba tiempo aún, pero J. Antonio nos dijo que ya estaban hechas. ¡Pardiez, magnífico!.

Emiliano está relajado, sigue descansando la espalda en la silla, está feliz, aunque nos dice que tiene sus pesadumbres, pero que los “alrededores” de esta aldea mundial las cosas no son mejores. Destaca lo conseguido en Ecuador por el presidente Correa, es notable lo que está consiguiendo comunicando con carreteras a todas las provincias ecuatorianas y creando un nuevo país con las infraestructuras necesarias para avanzar. Tal es su ímpetu que las naciones cercanas, por encima tiene a Colombia y por abajo Perú y algunas otras repúblicas cercanas se fijan en sus logros, e incluso algunas siendo de derechas se ven arrastradas por el tirón o empuje de Correa e intentan copiar el modelo de inversión, con lo que aún con ideologías contrarias están actuando en esa línea de desarrollo.

De Correa dice también que trabaja seis días en semana con largas jornadas de un buen número de horas y el domingo pasea con la familia, pero si encuentra un desperfecto en la calle llama o lo anota para que se repare de inmediato.

Cava y Hojaldrinas de chocolate: 
Pues en efecto las rodajas de piña estaban fritas y flambeadas con licor y riquísimas, a J. Antonio le debemos una. Pero el reportero olvidó recogerlas para el reportaje.

Con el postre Pedro nos cuenta que tiene el huerto preparado y en breve comenzará las siembras que cuajarán en la primavera. En cuanto a poner el nivel al huerto, insiste en que no es necesario el nivel de agua, otra cosa son  las grandes llanuras para cereales de los EEUU tratadas con laser para que sean planas y niveladas para que el riego sea posible.

Y Gabriel en este momento de sobremesa que se apetece un cigarrillo nos cuenta que está intentando controlar lo de fumar, que no le ayuda en nada y que le ha hecho pasar unas muy malas noches, de manera que “si aguanto un poco más será un pitillo menos”. Le pregunto por Rodrigo que está a punto ser padre y me cuenta que todo va bien, que irá al nacimiento pero en tren (todo un paseo), en cuanto al trabajo comenta que sigue aportando buenos productos musicales e introduciendo a músicos españoles en los conciertos. Europa acostumbrados a los clásicos de su ámbito a veces olvidan a los del extremo occidental, con ello Rodrigo Tomillo hace posible que un coreano y una austriaca canturreen flamenco… ¿Cómo se podrá hacer eso?

Le pregunto a Alfonso por el nombre del libro del hermano, del que me había olvidado, y me recuerda que era “Demasiado Ignacio”, el suyo, el de Alfonso,  es una recopilación abundando sobre la biografía del Ignacio ‘central’ el Sánchez Mejías y que presentarán al tiempo.

De remate al postre saqué una botella de cava y les digo: Con relación a lo que hablábamos esto es cava, es catalán, como podéis ver su  nombre es propio de allá, está dentro de los ocho apellidos catalanes, y tengo el placer de invitaos por cerrarse el acuerdo “in extremis” para formar el nuevo parlamento. Todos me miraron extrañados y hasta uno dijo ¡yo no tomo eso!, evidentemente lo tomó, lo tomamos todos, pero fue más convincente que los invitara por la entrada de un nuevo año 2016. Entendamos la parodia, porque extremismos los precisos, y desafectos de nosotros los andaluces nunca partirán.

Quedamos emplazados para el segundo lunes

Antonio